Todo parecía sacado de un libro de poemas
Todo parecía hecho con magia, luces y cristal porque con un solo toque podía explotar.
Parecía todo tan perfecto e irreal.
Fue darle un beso…
Y aunque nunca le gusto el café
Fue el mejor que probó en su vida.
Un beso con sabor a café mañanero, pero bebido al medio día.
La gente se sentía y parecía que danzaban solo para ellos
Era así…
No cabía nadie más
Solo dos cuerpos
Dos almas en la misma sintonía.
Dos corazones latiendo desbocados e intercambiando emociones en medio de una cafetería.